Peligra el futuro de Argentina: La tasa de natalidad cayó un 40% en casi 10 años
Desde el año 2014, la natalidad en Argentina cayó un 40%, marcando una de las caídas más pronunciadas en América Latina, según un reciente informe elaborado por el Observatorio del Desarrollo Humano y la Vulnerabilidad de la Universidad Austral.
El estudio revela que el país atraviesa una transformación en su perfil demográfico, evidenciada por el aumento de la población adulta mayor y una mayor cantidad de mujeres que encabezan los hogares, entre otros aspectos.
El informe, que toma como base cifras del INDEC, señala un crecimiento sostenido de los hogares sin hijos, los cuales representaron el 57% del total en el censo de 2022, en comparación con el 44% registrado en 1991.
Los porcentajes prácticamente se invirtieron en los dos momentos analizados: en 1991, el 56% de los hogares contaban con al menos un menor de 18 años, y el 44% no. En cambio, actualmente el 57% de las viviendas no tiene hijos menores, frente al 44% que si los tiene, lo que refleja un claro cambio en la estructura familiar, impulsado por el descenso de nacimientos y el aumento de la longevidad.
Los resultados fueron presentados el jueves 15 de mayo, en coincidencia con el Día Internacional de la Familia. De acuerdo con las Naciones Unidas (ONU), esta jornada tiene como objetivo “crear conciencia sobre el papel fundamental de las familias en la educación de los hijos desde la primera infancia, y las oportunidades de aprendizaje que existen para los niños“.
Entre las principales modificaciones en las dinámicas familiares se destaca el crecimiento de los hogares unipersonales, que actualmente constituyen el 25% del total, frente al 13% registrado en 1991.
De manera paralela, también se ha incrementado notablemente la cantidad de hogares monoparentales, predominantemente encabezados por mujeres. Al mismo tiempo, la proporción de personas mayores ha tenido un aumento considerable: los adultos mayores de 85 años pasaron de representar el 1,5% al 11,8% de la población desde 1991.
La disminución de la natalidad en Argentina pone en evidencia no solo transformaciones demográficas, sino también profundas modificaciones sociales que influyen en las decisiones relacionadas con la planificación familiar.
Esta preocupante situación se debe a la situación económica del país durante los últimos años, la falta de certezas sobre el futuro, la emigración de jóvenes hacia otros países y el impulso del aborto. En este contexto, los cambios en los patrones de maternidad son evidentes: la edad promedio para tener el primer hijo se ubica actualmente entre los 30 y 34 años.
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En términos estadísticos, el estudio revela que el promedio de hijos por mujer descendió a 1,4 a nivel nacional, alcanzando un valor mínimo preocupante de 0,9 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
El estudio sobre la transformación en las estructuras familiares argentinas reveló un aumento sostenido de hogares sin hijos o sin menores de 18 años en las últimas tres décadas.
Los datos muestran que, en 1991, el 44% de las viviendas no albergaban hijos menores, mientras que en 2022 ese porcentaje se elevó al 57%, lo que representa un crecimiento de 13 puntos porcentuales a lo largo de treinta años.
