En Luzu TV se rieron a carcajadas de un chiste pedófilo sobre la nueva hija de Marley
En Luzu TV, la plataforma de streaming emblema del progresismo millennial, se vivió una escena que provocó un profundo rechazo en amplios sectores de la sociedad. Durante la transmisión en vivo de Nadie Dice Nada, programa conducido por Nico Occhiato, un comentario de tinte pedófilo desató una reacción escandalosa en el estudio, en presencia del cuestionado conductor Marley.
El momento ocurrió cuando Marley, invitado junto a Florencia Peña, describía cómo le estaba secando la cara a su hija Milenka con una toalla. Peña preguntó:
—”¿Qué pasó ahora?”
A lo que Marley respondió, entre risas:
—”No, no, es para secarle la leche”.
La frase, interpretada de inmediato con un doble sentido por los presentes, provocó carcajadas descontroladas. Momi Giardina, panelista del ciclo, terminó tan tentada que se hizo pis en vivo.
—“Me hice pis”, confesó entre risas.
—“No, no, te measte. ¿Te measte en serio?”, le preguntó Occhiato, sorprendido.
—“Sí”, respondió Momi, y abandonó el set para ir al baño.
—“Encima el jean que tiene es clarito”, ironizó Occhiato, completando el cuadro del bochorno.
La escena, que se viralizó rápidamente, no tardó en recibir críticas por la ligereza con que se abordó un comentario con connotaciones pedófilas, especialmente teniendo en cuenta las múltiples denuncias que pesan actualmente sobre Alejandro Wiebe, alias “Marley”.
El conductor fue denunciado por segunda vez en la misma semana. Esta vez, la acusación proviene de un hombre oriundo de Paraná, Entre Ríos, quien aseguró haber sido víctima de abuso sexual por parte de Marley en 2008, hace 16 años.
“Mi memoria puede fallar en las fechas y en algunos datos, pero no olvidaré jamás el hecho de abuso”, afirmó el denunciante, un pianista emergente en aquel momento. En su testimonio, contó que vivía con su abuela, ofrecía conciertos y tenía el sueño de impulsar su carrera musical. Para ello, se contactó con personalidades del ámbito mediático, entre ellas Marley, quien lo invitó a su domicilio. Según su relato, el conductor le compró un pasaje de avión y lo buscó en un auto de alta gama.
La denuncia, presentada ante la Justicia, incluye detalles de la vivienda del conductor y del comportamiento que habría tenido durante el presunto abuso. Aunque los hechos habrían prescripto penalmente, el denunciante solicita un juicio por la verdad y pericias psicológicas y psiquiátricas. También pidió recuperar su antigua cuenta de Facebook para presentar los chats como prueba.
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Días antes, Adrián Alfredo Molina, de 44 años, ya había denunciado a Marley por corrupción de menores, acusándolo de hechos ocurridos cuando tenía apenas 17 años. Al igual que en el nuevo caso, solicitó un juicio por la verdad, ya que los delitos están prescriptos penalmente.
Este nuevo episodio no solo expone una falta total de sensibilidad frente a temas gravísimos como el abuso infantil, sino que confirma la existencia de un doble estándar moral: mientras ciertas expresiones son censuradas por considerarse “ofensivas” o “políticamente incorrectas”, otras, avaladas por el progresismo cultural, gozan de impunidad absoluta, incluso si rozan lo criminal. Pero en Luzu TV, el chiste pedófilo provocó risas. Y Marley, aún denunciado por abuso sexual, sigue cosechando aplausos.
